
Durante mucho tiempo se nos ha dicho, a saber por qué, que los perros veían en blanco y negro. “Qué bonito —pensábamos—. Como en Casablanca y tal”. Pero no; resulta que era todo mentira. Ahora sabemos que los perros son perfectamente capaces de ver el color (en Casablanca no, claro; eso sería muy loco). Lo que ocurre es que ven menos colores que nosotros. Su visión es dicromática, mientras que la nuestra es tricromática. Si eso te hace sentir lástima por tu perro, que es incapaz de apreciar la infinita paleta de color del otoño en vuestros paseos por el bosque, piensa que un águila cualquiera, con su visión tetracromática se reiría de ti… y que tu perro piensa que tu olfato da pena.
Un comentario
Hi, this is a comment.
To get started with moderating, editing, and deleting comments, please visit the Comments screen in the dashboard.
Commenter avatars come from Gravatar.